Forzando el Rugby
En mi pueblo, hay un pequeño equipo de rugby donde juegan algunos amigos. Hace poco, me propusieron la idea de hacerles un reportaje fotográfico durante uno de sus entrenamientos. La propuesta me intrigó, así que acepté el reto. Como no podía ser de otra manera, además de llevar mi cámara digital, decidí llevar también una cámara de película. Sabía que podría capturar algo especial y diferente con ella, algo más visceral y auténtico.
Me lancé a la aventura, consciente de que nunca antes había visto un partido de rugby en vivo, y mucho menos un entrenamiento. No sabía muy bien qué esperar ni cómo sería la dinámica en el campo, pero rápidamente, al observar los primeros movimientos, surgieron dos palabras que me ayudaron a definir lo que tenía frente a mí: potencia y velocidad. Esos conceptos serían la base sobre la cual desarrollaría mi enfoque fotográfico para el reportaje.
Después de analizar el entorno y pensando en el tipo de imágenes que quería capturar, decidí forzar un carrete de ISO 400 a 800. Esta decisión no fue casual; quería darles a las fotos un toque más rudo, más auténtico, con ese grano característico que aporta la película cuando se fuerza el ISO, una textura que resonara con la dureza y la fugacidad del rugby.
Mi objetivo era capturar la esencia del deporte en dos dimensiones clave: los impactos, ese momento explosivo donde los jugadores chocan con toda su fuerza, y la velocidad, reflejada en los esprints y las jugadas rápidas que desatan la tensión del juego. Sin embargo, también me centré en hacer retratos de los momentos en que no había acción.
Para el equipo, decidí llevar un teleobjetivo de 300mm, ya que no estaba seguro de la distancia a la que estaría del terreno de juego. Mirando hacia atrás, creo que también habría sido útil llevar una lente más corta, algo más versátil para los retratos y las tomas más cercanas.
Después de mi experiencia, me pregunto si alguien aquí ha hecho fotos nocturnas de este tipo de deportes y qué película habríais usado en mi lugar.
Equipo utilizado: Mamiya MSX1000, con la lente TAIR-3
Película: Kodak Ultramax 400 forzado a 800